La Fundación Española del Aceite de Palma Sostenible lanza el primero de los tres vídeos dedicados a explicar la producción sostenible del aceite de palma. Estos vídeos han sido cedidos por la European Palm Oil Alliance (EPOA), el grupo de trabajo europeo con quien colabora activamente.
En esta primera pieza se pone el foco en el molino, el lugar donde llegan los racimos de fruta fresca. Su madurez determina la cantidad del aceite que se obtiene. En el molino se revisa su calidad, se seleccionan y se procesan para separarlos en componentes funcionales: un 45% de mezcla de palmiste, fibras y aceite, un 23% de racimos vacíos y un 32% de residuos que se desecha. Mientras, los vacíos sirven, sobre todo, para compost, ya que es rico en nutrientes para las plantas, aumenta la fertilidad del suelo y ayuda a retener el agua. Otros usos de estos racimos vacíos son combustible y material que genera calor para la caldera de vapor.
El siguiente paso en el tratamiento de los racimos es tratarlos con vapor. De esta forma se libera de bacterias, se evita la degradación y se debilita la fruta. A continuación, se separan los componentes de la masa (agua, aceite, fibras y palmiste) y se prensa a alta presión para exprimir el aceite y el agua. Este aceite se divide mediante separación de fases, llegando a conseguir el aceite de palma crudo que requiere un procesamiento adicional en una refinería. Precisamente en la refinería es donde seguirá la explicación del proceso de producción del aceite de palma con un nuevo vídeo de EPOA.