Estudio demuestra la no correlación entre la ingesta del aceite de palma y las enfermedades cardiovasculares

Una revisión sistemática sobre el consumo de aceite de palma y el riesgo de enfermedad cardiovascular (“Systematic review of palm oil consumption and the risk of cardiovascular disease”), publicada en la revista científica especializada en medicina y ciencia, Plos One, pone de manifiesto la importancia de seguir investigando entre la posible asociación entre la ingesta de aceite de palma y el incremento del riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.

El estudio mencionado anteriormente fue realizado por un equipo de científicos del Instituto de Investigación Médica de Kuala Lumpur (Malasia) del Departamento de Investigación Cardiovascular, Diabetes y Nutrición. El objetivo de dicho trabajo fue estudiar la asociación del consumo de aceite de palma con el riesgo de enfermedad cardiovascular y la mortalidad específica por dicha enfermedad. Para ello la metodología empleada consistió en realizar búsquedas de estudios observacionales y de intervención sobre enfermedad coronaria y accidente cerebrovascular, utilizando palabras clave relacionadas con estos resultados y aceite de palma en las principales bases de datos (Central, Medline y Embase).

Los resultados de esta revisión no pudieron establecer pruebas sólidas ni a favor ni en contra del consumo de aceite de palma en relación con el riesgo de enfermedad cardiovascular y la mortalidad específica por enfermedad cardiovascular. Por lo tanto, de esta manera se pone de manifiesto que la evidente abundancia de aceite de palma en el mercado hace que sea una prioridad poder cuantificar la posible asociación entre el consumo de aceite de palma y el riesgo de enfermedad cardiovascular.

Tras los resultados del estudio, podemos concluir que no se puede establecer una correlación entre el consumo de aceite de palma y el desarrollo de enfermedades cardiovasculares, ya que se necesitan más estudios en los que no haya un sesgo en los criterios de selección y  que tenga en cuenta la inclusión de otros alimentos que están presentes en la dieta que junto con el aceite de palma y demás variables pueden influir en los resultados. Sin embargo, es muy importante recalcar que para tener una buena salud cardiometabólica se debe priorizar una dieta saludable adaptada a los requerimientos energéticos de cada individuo, acompañada de ejercicio y de un estilo de vida activo.

Irene Castillo

Asesor científico